¿Se puede estar en forma y además ser más inteligente?
Piense en un medicamento que lo colocaría un 33% por encima de sus pares; piense en una pastilla con la cual podría comenzar cada año con dos meses de ventaja sobre todo estudiante. Esto es posible: se denomina “Educación física con predisposición para el aprendizaje”.
En las escuelas de Estados Unidos están atravesando un periodo de desaceleración. De hecho, conforme a estudios realizados por NAEP en 2008, los estudiantes de nivel secundario no han mejorado sus calificaciones desde 1971. Si se tratara de otro tipo de epidemia, la reacción de este país sería instantánea. Imposibilidad de mejorar en matemáticas y en ciencias… mmm. Es increíble que los burócratas de la salud no sepan qué hacer. Paul Zientarski propuso intentar algo nuevo: realizar ejercicio. Lo que ha descubierto fue impresionante no sólo para él, sino para todos.
En el distrito de Naperville 203 (Illinois), los estudiantes pueden elegir entre una docena de actividades cada mañana para aumentar el ritmo cardíaco. Los estudiantes se colocan un medidor de pulsaciones y participan de la actividad durante 25 minutos, cinco días a la semana, sus pulsaciones se elevan entre 160 y 190 latidos por minuto. Este estudio comenzó en 2004, los estudiantes que estaban en riesgo debido a sus calificaciones bajas en lectura y matemática participaron en estos ejercicios con el señor Zientarski. Estos ejercicios pueden abarcar lectura, ejercicios matemáticos o simplemente juegos para aumentar el ritmo cardíaco antes de que comiencen las clases.
El doctor John J. Ratey manifestó “el ejercicio por sí mismo no hace más inteligentes a las personas, pero coloca el cerebro en las condiciones óptimas para el aprendizaje”. Los estudiantes que participaron en este estudio aumentaron sus calificaciones en matemática un 20%, mientras que los que concurrieron solamente a matemática aumentaron un 3,8% sus calificaciones. Este colegio secundario de Illinois pasó de ser una de las que tenía las calificaciones más bajas de los Estados Unidos a ser una de las que posee calificaciones más elevadas. En la actualidad, la investigación es más rigurosa y los resultados son cada vez mejores.
Diez años atrás, Phil Lawler y el señor Zientarski comenzaron a utilizar medidores del ritmo cardíaco en Naperville. La idea primitiva fue promover la expectativa de vida del corazón y lograr que las personas se entrenen, en lugar de que aprendan las reglas de los deportes, como ocurre en la mayoría de las clases de educación física en Estados Unidos. Solamente el 6% de las escuelas de este país brinda clases de educación física cinco días a la semana.
Cada vez en mayor medida, el BOOTCAMP para niños ofrece una alternativa extracurricular para las clases de gimnasia. Se trata de combinar los aspectos básicos de la gimnasia con patrones de movimiento funcionales; los cuales incluyen correr, levantar peso y calistenia. Los niños que practican BOOTCAMP se encuentran en un nivel de elite en cuanto al estado físico que no tiene comparación con ningún otro programa escolar.
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